Poster TotoroTonari no Totoro
1988
Director: Hayao Miyazaki
Guión: Hayao Miyazaki
Producción: Nibariki, Tokuma Japan Communications, Studio Ghibli
Música: Joe Hisaishi
Animation, Fantasy, family

Corre la década de los 50 en Japón. Satsuki y Mei y su padre se mudan a una casa de campo situada en la prefectura de Saitama, a las afueras de Tokyo, para estar cerca del hospital en el que se encuentra internada la madre de las niñas por tuberculosis espinal. La preocupación de las niñas por la salud de su madre, se ve exacerbada por las largas horas que pasa su padre, el profesor Kusakabe, en el departamento de arqueología de la Universidad de Tokyo. Sin embargo, encontraran en Totoro, el espíritu del bosque, la fuerza y la inspiración necesarias para sobrellevarlo todo.

Mi vecino Totoro es una historia original de Hayao Miyazaki en la que mezcla motivos de la literatura japonesa y universal y motivos shintoístas con sus propias experiencias personales y elementos de su imaginario particular. Así, por un lado tenemos que el guión toma prestado ciertos elementos obvios del cuento del poeta Kenji Miyazawa Las bellotas y el gato montés (1985), y que el Gatobús se inspira en el gato Cheshire de Lewis Carroll. Pero de Carroll toma prestado alguna cosa más de su Alicia en el País de las Maravillas (1865); Alicia se queda dormida bajo un árbol y sueña que persigue un conejo mágico por el bosque hasta encontrar un pasaje que atraviesa entre raíces y tierra y caer en el mundo de las Maravillas. De la misma manera, Mei persigue a los totoro pequeños por el bosque y se adentra en un pasaje de raíces y hojas bajo un gran árbol hasta caer en la cómoda barriga de Totoro y quedarse dormida con él. Pero mientras Alicia experimenta un viaje onírico, Mei hace un viaje mucho más introspectivo al reino de las almas, indicado claramente por las mariposas que revolotean a su alrededor cuando cae por el agujero hasta Totoro. Miyazaki usa aquí las mariposas, diría Shore, como símbolo del mundo anímico en representación de la psiqué griega (SHORE, 2014); sólo que este es un mundo anímico al que sólo los niños de corazón puro pueden acceder. En este mundo anímico, los Totoro son los espíritus del bosque, una personificación de la naturaleza propia de los kami shintoístas.

Por otro lado, Mei tiene aproximadamente la misma edad que tenía Miyazaki cuando su madre contrajo tuberculosis espinal y su familia tuvo que mudarse al campo durante los nueve años que la madre estuvo luchando contra la enfermedad. Además, la película tiene lugar en las colinas de Sayama de la prefectura de Saitama, donde vive actualmente el director (MCCARTHY, 2008) –de hecho, el Totoro Forest Project recauda donaciones para mantener intactas las colinas de Sayama—. En lo que respecta a los elementos de su propia imaginación sin duda Totoro es el personaje más rentable de los que ha creado Miyazaki. El nombre proviene de la mala pronunciación de trol en japonés (tororu) ya que Mei está leyendo en esos días el cuento de hadas noruego Las tres cabras macho Gruff y cree que Totoro es un trol como el del libro. Pero los Totoro no son los únicos personajes productos de la imaginación del director; también lo son los susuwatari “espíritus del polvo” a los que el director confiere el estatus de obake cuando la abuela los identifica como espíritus propios del folclore japonés.

totoro

En este film, Miyazaki deja a un lado la acción que ha habido en sus filmes anteriores para dedicarse a un público mucho más infantil, pero el mensaje es el mismo en el fondo: la importancia de la relación entre el ser humano y la naturaleza. Wegner argumenta que el director nos propone en el film una utopía alternativa en la que la restauración Meiji de 1868 no tuvo lugar, ni la catástrofe de la Segunda Guerra Mundial, sino que Japón se modernizó de una manera gradual y pacífica, manteniendo sus satoyama (zonas de bosques gestionadas por comunidades agrícolas locales) como organizaciones políticas. De hecho apoya su tesis en el hecho de que Mi vecino Totoro se proyectara conjuntamente con La tumba de las luciérnagas (1988) de Isao Takahata. Según Wegner, mientras Takahata retrata las devastadoras consecuencias de la Segunda Guerra Mundial en la población japonesa, en concreto en los niños, Miyazaki ofrece una utopía alternativa en la que Japón ha sabido mantener el equilibrio entre la modernidad y la naturaleza y sus niños no han tenido que sufrir (WEGNER, 2010).

El tema del equilibro entre el ser humano y la naturaleza tiene una importancia especial en el shintoísmo, y es que Mi vecino Totoro es una de las películas de Miyazaki con más elementos shintoístas. No sólo el tema, sino que, a lo largo del film, vemos toda una clase de elementos y costumbres que se identifican claramente con la religión shintoísta. Aunque el director ya ha expresado firmemente que su intención no era exaltar el shintoísmo ni cualquier tipo de religión en esta película (mencionado en MCCARTHY, 2008), es innegable que el shintoísmo que presenta es el anterior a la Restauración Meiji, sin la instrumentalización que hizo de ella el imperialismo japonés, sino un shintoísmo que ha evolucionado a la par que las comunas agrícolas y que hace posible el encuentro de las niñas con Totoro (WEGNER, 2010). Pero además, el tema de la exaltación de la naturaleza tiene una larga trayectoria en la cultura asiática, tanto en la pintura paisajística como en la poesía; de hecho, el motivo del retiro espiritual en la naturaleza para encontrarse con uno mismo –muy ligado a las dos disciplinas artísticas mencionadas– se remonta a la dinastía China Tang (618-907 d.C.). Yo veo en Mi vecino Totoro una clara renovación de este motivo tradicional, en tanto las niñas maduran gracias a su contacto directo con la naturaleza y en tanto el tono de la película evoca melancolía, nostalgia y una naturaleza bucólica; como si de un haiku se tratara.

Shore señala, además, que Miyazaki rememora en el film su propia angustia ante la separación de su madre y convierte a Totoro en el sustituto materno que les ofrece bellotas para ayudarlas a crecer y madurar, y deja dormir a Mei en su barriga como hacen las madres con los bebés. Con la seguridad que les da Totoro, las niñas emprenderán su propio camino independientes de la figura materna, como punto de partida de su viaje como heroínas. Satsuki y Mei no son, por tanto, las típicas heroínas miyazakianas sino un proyecto temprano, cuyo encuentro con Totoro marcará sus vidas para siempre. Pero además, Totoro se identifica con la madre naturaleza y su poder regenerativo, como se ve claramente en la escena de la danza de fertilidad que hacen los totoros para hacer crecer las bellotas que han plantado las niñas (SHORE, 2014).

my-neighbor-totoro-family

Mi vecino Totoro no es sólo la película favorita de los niños japoneses, también era una de las películas preferidas de Akira Kurosawa: “Es animación, pero me conmovió mucho. Me gustó mucho el Gatobús. No hubiera tenido esa idea. Lloré cuando vi Nicky, la aprendiz de bruja. Ciertamente, todos los talentos que quiero para la industria del cine se van a la animación, así que el cine tiene que trabajar duro. Tenemos que hacer películas de tal calibre que los jóvenes quieran venir al cine” (mencionado en MCCARTHY, 2008). Ganarse la admiración de Kurosawa a la vez que hacia lo propio con la población infantil no era tarea fácil; para ello Miyazaki tuvo que equilibrar, como sólo él sabe, temas adultos con motivos infantiles. El resultado, una película por la que no pasan los años. Fascinante y divertida cuando eres un niño. Conmovedora y exquisita cuando eres un adulto.

BIBLIOGRAFÍA:

CAVALLARO, Dani.  The Anime Art of Hayao Miyazaki.  North Carolina: McFarland, 2006, pp. 212.
McCARTHY, Helen. Hayao Miyazaki: master of Japanese animation: films, themes, artistry. Berkeley: Stone Bridge, 2008.
SHORE, Lesley Anne. The Anima in Animation: Miyazaki heroines and post-patriarchal consciousness. Pacifica Graduate Institute. Facultad de filosofía. 2013. USA: ProQuest LLC, 2014. Tesis doctoral.
WEGNER, Phillip E.. “”An Unfinished Project that was Also a Missed Opportunity”: Utopia and Alternate History in Hayao Miyazaki’s My Neighbor Totoro.” . ImageTexT: Interdisciplinary Comics Studies. 5.2 (2010). Dept of English, University of Florida. 28 Feb 2015. <http://www.english.ufl.edu/imagetext/archives/v5_2/wegner/>.

Redacción: Sabrina Vaquerizo (@svaquerizo)

3 Respuestas

  1. Juan Miguel

    Una entrada fabulosa, su analisis y disección de esta película (para muchos ya un clásico del cine) es sublime.
    Me ha gustado muchísimo, la recomendaré a mis hijas.

    Responder

Hacer Comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.