Cüneyt Arkin, cuyo verdadero nombre es Fahrettin Cureklibatur, nace en Eskisehir (Turquía) en 1937. Seria un joven estudiante muy aficionado a lo épico, escribiendo historias que llegaría a enviar a magazines y revistas durante su paso por la secundaria. El joven terminará por realizar estudios superiores en Medicina. En 1957 participa casi por casualidad en unas pruebas que un diario hacia para encontrar nuevos talentos y así se introduciría en el mundo del cine. Empezaría rodando cintas sentimentales y románticas, muy de moda en aquellos años en todo el mundo musulmán, antes de pasarse a papeles mas “viriles” durante los 60 y 70. Se dice, aunque no con seguridad, que pudiera haber trabajado en un circo durante cierto tiempo, practicando allí sus habilidades acrobáticas.

Cüneyt Arkin es un verdadero icono popular en su Turquía natal. En 50 años de carrera ha participado en casi 300 películas, aunque la mayoría de ellas no ha trascendido fuera de las fronteras de su país. La salida en DVD en Turquía de la alucinante y psicotrónica “The Man Who Saves The World” (“Dünyayi kurtaran adam”, Çetin Inanç, 1982), conocida popularmente como el “Star Wars Turco”, ya que robaba descaradamente escenas de la película original de Lucas y las insertaba de una manera imposible en la cinta -además de mezclar la banda sonora con cortes musicales provenientes de cintas como Flash o Indiana Jones-, nos da la oportunidad de descubrir uno de los cines mas curiosos y desconocidos del mundo, el cine popular Turco.

Alucinante, delirante, psicotrónico… todo esto y mucho mas forma parte de ese cine de bajo presupuesto y medios que entre los 60 y los 90 plagó las pantallas turcas, un cine que se abre cuan cueva de Ali Baba para los amantes de la serie Z mas dura y las exploitations mas bizarras. Ingenuidad y simplismo en los personajes y argumentos, efectos especiales de cama elástica, cartón y fieltro, desvergonzados plagios de temas, escenas y bandas sonoras de las cintas de mayor éxito en América. Superman, E.T., Robin Hood, El Señor Spock… todos tendrán su doble turco mas o menos, generalmente menos, fiel. Como dijo el mismo Arkin en una entrevista: “No teníamos dinero, pero trabajábamos duro para hacer algo que la gente pudiera ver para olvidar momentáneamente sus problemas”.

Cüneyt Arkin representa al héroe POP turco por excelencia: viril, deportivo, carismático, su porte y ojos claros van a hacer de él todo un mito. Cualquiera que sea el escenario, los suburbios de Ankara, las cuevas del desierto, el oeste americano o el espacio, Arkin sigue siendo Arkin: un tipo silencioso y recto que choca contra malvados que atormentan a la población local y que deberá poner orden a base de golpes, espada, revolver o sable laser.

Podemos ver a Arkin como héroe musculado en cintas como “Istambul Sokaklarinda” (1964) o “Cemil” (1975), interpretando en esta última a un karateka que se enfrenta a unos desagradables proxenetas al ritmo de la música de Operación Dragón (la Bruceploitation a la turca, lo que nos faltaba por ver jajaja). El público ya lo asociaba con este tipo de héroe puro y duro, que seduce a la chica (a cualquier chica) y defiende al débil.

También aparece en grandes epopeyas bélicas o históricas (una de sus grandes pasiones) como, por ejemplo, la serie de películas de “Battal Gazi”, que consta de 5 partes realizadas en los primeros compases de los años 70, donde interpreta a un musulmán que debe enfrentarse a viles cristianos bizantinos capaces de las mayores bajezas. Estas cintas no se cortaban ante nada: Combates que usan y abusan de trampolines, una joven virgen violada y crucificada por dudosos bárbaros cristianos, una perversa monja vestida con una cruz de tela que apenas tapa su desnudez, un héroe que de una patada cercena las piernas de su enemigo… todo ello destacado por una mezcla de sadismo, erotismo esquivo (no deja de ser un país mayoritariamente musulmán), e ingenuidad absoluta hacia estos productos, que estaban considerados autenticas superproducciones en Turquía.

La carrera de Arkin despega de forma vertiginosa y rápidamente enlaza los rodajes. En los 60 reconoce haber participado en mas de 20 películas al año. Por si fuera poco no faltaba mucho tiempo para que él mismo se convirtiera en productor, director o incluso guionista de varias de sus películas.

Cüneyt se atrevería incluso con el western, por otra parte muy de moda en los 70 en Turquía. No duda en equiparse como Clint Eastwood (poncho y eterno cigarro) para la cinta “Kuçuk Kovboy” (1973), del director y guionista italiano Guido Zurli y donde se codea con el culturista Alan Steel y con Pascale Petit, actriz francesa que tuvo sus momentos de gloria en los años 60.

A partir de mediados de los 70 este tipo de cine intentará exportarse internacionalmente. Si Arkin ya era famoso en el mundo árabe, va a realizar algunas coproducciones bajo nombres tan curiosos como George o Esteban Arkin. Sus películas empezarían a trascender poco a poco y así “Lion Man” (1975), donde interpretaba a un valiente musulmán salvado por una leona tras la masacre de su familia a manos cristianas y que consigue auténticos poderes sobrehumanos para su venganza, se dirige particularmente a Italia como punto de entrada en occidente. Ese mismo año se produciría su primera aparición en un Giallo italiano, acreditado como Joseph Akin, en la cinta “La Polizia brancola nel buio”. Al año siguiente vuelve a la carga internacional con 2 comedias de acción dirigidas por el austriaco Ernst Hofbauer, “Mettetemi in galera” y “Che carambole… ragazzi” (traducida como The Three Superboys Strike Again). Además vería la luz el clásico “Karamurat, la belva dell’ Anatolia”, de nuevo con Hofbauer.

Después de esto pasamos al 79 y a la increíble “3 Supermen Against Godfather” (editada en España como “3 Supermanes contra el Padrino”), de Italo Martinenghi, donde compartiría cartel con Nick Jordan (alias Aldo Canti) y Sal Borghese. En la cinta los 3 héroes debían evitar que una mafiosa organización pusiera sus manos sobre una máquina de viajar en el tiempo.

Siguiendo con las curiosidades de la filmografía de Cüneyt aún podemos encontrar a un asesino ninja en “Karate on the Bosphorus” (1974), que incluía escenas de Bolo Yeung. Esta cinta se estrenó incluso en Hong Kong, diciendo la leyenda que los chinos lo apodaron Lee Arkin (!!!). Otra curiosidad la tenemos en la coproducción italo turca “Kriminal Porno” (1979), que vio la luz en España con el título de “Sexo Criminal”, película con super criminal maniaco y algunos cortes de cintas porno de la época.

Pero sin duda Cüneyt alcanza el máximo nivel de bizarrismo y conmoción, ahora visto desde la perspectiva del tiempo claro está, con “The Man Who Saves the World” (1982), exploitation delirante y descarada del Star Wars de Lucas. La cinta no es fácilmente comentable ni clasificable así que os insto a verla, recordad que se la conoce como el “Star Wars Turco”, y a sacar conclusiones jajajajajajaja. Desde finales de los 70 Arkin también potencia su papel de director y guionista en bastantes cintas.

Con los 90 el cine popular turco, al igual que el europeo o la serie B americana, desaparece en contra de las grandes producciones made in USA que saturan el mercado (una docena de películas turcas realizadas en 2003 contra las 298 realizadas de 1972). Cüneyt casi no realiza películas desde finales de los 80 y decide entonces pasarse a televisión en producciones mas serias o con contenidos sociales. Intenta una carrera política poco exitosa, presentándose como diputado en 1991. Se le puede ver también como portavoz del equipo nacional de esquí. Después de haber participado en numerosas series de televisión publica sus memorias en 2001.

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Tras el paso a un nuevo siglo los jóvenes turcos redescubren las delirantes producciones del cine pop de su país y El Star Wars Turco se convertirá rápidamente en objeto cinéfilo de culto. En la actualidad, cuando la producción nacional esta en proceso de resurgir, Cüneyt vuelve a estar de moda, aunque sea mas por su lado de “mito pop clásico” que por otra cosa. Esta nueva popularidad provocó que viera la luz “Dünyayi Kurtaran Adamin Oglu” (2006), intento de secuela del Star Wars turco original, pero actualizado a los nuevos tiempos y sin esa producción tan serie Z de antaño.

La moda actual por lo B, por lo Z, por todas las producciones clásicas del pop mundial, es evidente, y para cualquiera mínimamente aficionado al “pop de derribo” Cüneyt Arkin debe ser un punto de referencia y un personaje del que repasar toda su filmografía (o al menos la localizable, que no es mucha). Este quizás sea un ejercicio de zetosidad extrema, pero seguro que es ampliamente disfrutado por todas las mentes enfermizas y gustosas de lo bizarro, entre las que me incluyo jajaja.

 

2 Respuestas

  1. la mari san

    Ya que instas, pues veremos el “Star Wars turco” jejejeeje… Uy! viendo el cartel me suena…

    Tambien me ha llamado la atención “Battal Gazi”.. Lo de los trampolines, la virgen violada y la monja perversa… uffff!!! Tira!

    Bonitos carteles, por cierto…

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  2. filomeno

    Sal Borgese, uno de los famosos “Supermen” hispanoitalianos, como George Martin (Francisco Martinez Celeiro), Brad Harris, Frank Braña y Aldo Sambrell.

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